La informática doméstica o personal.
En la actualidad los microordenadores están destinados al uso individual o doméstico, en oposición a los ordenadores utilizados en el mundo empresarial o institucional (miniordenadores o mainframes), con la única excepción de los microordenadores conectados a ordenadores mayores o entre sí en forma de red, no obstante cada uno de los microordenadores así organizados debiera ir ligado a un único individuo.
En la actualidad los ordenadores han abandonado su primitiva asignación de tareas específicas para erigirse como vehículos de comunicación, creado, almacenando y transmitiendo información a otros individuos. Desde el punto de vista de la comunicación cabe destacar también el proceso de texto e incluso la utilización de videojuegos.
Todas estas funciones favorecen el hecho de que con frecuencia el impacto de los ordenadores se compare con el de otros medios de comunicación tales como el teléfono y la televisión.
Esta situación propicia que hoy día nos planteemos los siguientes interrogantes:
¿Que hogares o individuos adoptan la tecnología informática? ¿Cuales son sus características frente a los que no la adoptan? ¿Que diferencias existen entre los usuarios tempranos y los tardíos?
¿Con que extensión y para que tareas se usan los ordenadores en el hogar? ¿Varían estos patrones a lo largo del tiempo?
¿Cual es el impacto social derivado del uso de ordenadores en el domicilio? ¿Como afectará al modo en que la gente utiliza su tiempo, aprende u organiza su ocio? ¿Influirá sobre la privacidad, las libertades civiles o derechos sobre la propiedad?
La adopción de un ordenador en el hogar.
El status social es una de las principales variables que influyen en la introducción en el domicilio de un ordenador personal. A lo largo del tiempo los valores críticos que determinaban el status han ido actualizándose a la baja, hasta llegar a nuestros días donde el peso de esta variable es muy relativo, alcanzándose la plena popularización.
La investigación realizada relaciona variables tales como el nivel de ingresos, nivel educativo y actividad profesional como elementos relacionados con la introducción de la tecnología informática en el hogar. No obstante debemos considerar como estas variables se encuentran mas relacionadas con el carácter innovador de los primeros años de la informática doméstica que con sus características intrínsecas.
Características personales. (variables demográficas y actitudinales).
La mayor parte de investigaciones realizadas coinciden en señalar como los individuos mas proclives a adoptar la tecnología microinformática en su actividad diaria fueron, en un inicio, los que tenían edades comprendidas entre los 30 y 45 años, aventajando incluso a los individuos mas jóvenes. Progresivamente la edad de los usuarios ha tendido a disminuir.
Esta situación probablemente está relacionada con el hecho de que la decisión de compra de un ordenador pertenece todavía a los padres, influyendo los hijos en la adquisición de consolas de videojuegos. Esta situación permite que los intereses entusiastas de los hijos puedan verse fácilmente vetados por el desinterés parental. Recordemos como en la época de los nanoordenadores existía un mayor protagonismo del público infantil y adolescente, tratándose de máquinas que muchas veces se conceptualizaron como juguetes.
El sexo parece constituirse en una variable relevante en la forma de introducción de los ordenadores en el hogar, haciéndolo habitualmente de la mano de personajes masculinos, si bien es posible apreciar un progresivo incremento en la participación femenina.
Los sujetos que introducen un ordenador en su domicilio suelen mayores intereses y actitudes mas favorables hacia la ciencia y la tecnología. Ello explica que la mayor parte de sujetos que compra un ordenador (alrededor del 70%) lo haga sin considerar un uso específico, basándose únicamente en la posibilidad de aprender mas acerca de las nuevas tecnologías.
Esta situación se produce esencialmente entre aquellos que adoptan la tecnología informática de modo temprano (ya sea como innovación o por su edad) y su perfil suele caracterizarse por dedicar menos tiempo a la TV y a las actividades sociales, en favor del tiempo dedicado a actividades solitarias. También suelen practicar menos deporte, durmiendo habitualmente un menor número de horas. Por último también cabe destacar como suele tratarse de sujetos que han adoptado otras tecnologías individuales tales como calculadoras, agendas electrónicas y videojuegos.
Marco sociocultural.
La utilización de un ordenador en el domicilio es una forma de comportamiento determinada por el entorno social, laboral e informático que rodea al individuo, tanto en el propio domicilio como fuera de él. Las redes de relaciones sociales resultan especialmente importantes en la aceptación de cualquier innovación y la informática personal no resulta una excepción. De este modo cabe destacar la organización de los establecimientos que comercializan los productos de Apple, que ofrecen además el valor añadido de una serie de servicios mas propios de un grupo de amigos.
Desde el punto de vista laboral cabe destacar como los usuarios de ordenadores en el domicilio, resultan mas proclives a adoptar esta tecnología en sus trabajos, hecho que resulta especialmente evidente entre los niños y en relación a la escuela.
El impacto social de los ordenadores domésticos.
Sólo tres de las seis categorías en que se ha dividido el impacto social de la informática doméstica cuentan con un respaldo amplio en cuanto a investigaciones : aprendizaje y educación, ocio y trabajo domiciliario son las facetas que han recibido una mayor atención por parte de los investigadores, no obstante un reducido grupo de trabajos han puesto en evidencia impactos en áreas tales como el funcionamiento familiar, rutinas domésticas y privacidad, libertades civiles y derecho a la propiedad.
Diferentes trabajos confirman como el tiempo dedicado al estudio y el interés de los niños en la realización de tareas escolares en el domicilio aumenta cuando se introduce la utilización del ordenador. Otros autores consideran que este fenómeno se encuentra ligado al hecho de que los padres que deciden la utilización de un ordenador poseen niveles educativos mayores que los que no lo hacen, reforzándose una tendencia en relación a la educación de los hijos que ya existía con anterioridad.
Es en el tema relativo al ocio donde el impacto de la informática doméstica es mas evidente. Muchos usuarios reconocen como la adquisición de un ordenador personal ha disminuido de modo considerable el tiempo dedicado a ver la televisión.
En otros trabajos se recogen datos que hablan de una disminución del tiempo de sueño de los usuarios de ordenadores, disminución del tiempo dedicado a deportes al aire libre, disminución del interés en las artes y disminución del tiempo que se dedica a la radio, música y lectura. Sin embargo estos datos deben considerarse con precaución ya que los trabajos realizados presentan importantes lagunas metodológicas. Muchos de ellos se basan en informes subjetivos, recogiendo información de usuarios ya establecidos, sin que exista ninguna información de su comportamiento anterior a la utilización del ordenador. Tampoco se suele distinguir entre usuarios intensivos y los de características mas moderadas. Por último también cabe destacar como la mayor parte de estos trabajos se realizaron en la primera época de la informática doméstica, donde muchos usuarios eran auténticos "fanáticos" de los ordenadores. Los mismos autores llegan a la conclusión de que los usuarios de ordenadores pasan mas tiempo solos, dedican gran parte de su tiempo al ordenador y organizan sus relaciones sociales en base a los grupos de usuarios, clubs y revistas de informática. Estas conclusiones no difieren en gran medida de las que se escribieron sobre los rasgos de personalidad de los primeros informáticos profesionales (años 60 y 70), evolucionando este sector de modo muy diferente en cuanto los ordenadores empezaron a popularizarse y se perdió la aureola de misterio. Es por este motivo que podemos pensar que estas aseveraciones pueden verse muy mediatizadas por el momento en que se desarrollaron estos trabajos (en la primera época de la informática doméstica).
Las rutinas domésticas se ven afectadas de diferentes formas a partir de la introducción de un ordenador personal. Unos pocos usuarios automatizan algunos procedimientos domésticos tales como el encendido y apagado de las luces, calefacción, etc. Sin embargo las utilizaciones domésticas mas extendidas hacen referencia a la contabilidad doméstica (gastos, presupuestos) y a las aplicaciones esencialmente personales.
Por último deberíamos destacar algunos estudios orientados a valorar aspectos tales como la privacidad y las libertades civiles. En estos trabajos se comprueba como los sujetos que utilizan un ordenador personal se sienten menos preocupados que los que no lo utilizan acerca del peligro que puede representar el tratamiento informático de datos sensibles, no obstante esta situación puede estar mediatizada por el hecho de que los sujetos que utilizan un ordenador en su quehacer diario suelen poseer niveles educativos superiores a aquellos que no lo utilizan, por lo que las diferencias en sus actitudes podrían ser realmente debidas a las diferencias culturales y no tanto al hecho de utilizar o no un ordenador.